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HECHOS 20:24

No me preocupa si tengo que morir. Lo que sí quiero es tener la satisfacción de haber anunciado la buena noticia del amor de Dios, así lo ordeno El Señor.

martes, 7 de mayo de 2019

DE LO RECIBIDO DE TU MANO TE DAMOS.


DE LO RECIBIDO DE TU MANO TE DAMOS.


Alguna vez se ha preguntado, ¿qué es lo que tú Le das a Dios? Muchas personas son de esta opinión: Dios no necesita del ser humano, por lo tanto nada tengo que darle. Aparentemente esta opinión es válida y poderosa, pues se sobre entiende que Dios es Omnipotente, Todo Poderoso y Vive por sí Solo. ¿Que necesita entonces del pobre ser como tú y como yo?

No obstante esta opinión no está dentro de lo correcto, porque nuestro Señor Jesucristo NO opina igual, pues Él dijo en MATEO 22:21 “… PAGAD PUES A CÉSAR LO QUE ES DEL CÉSAR Y A DIOS LO QUE ES DE DIOS…” Si, a Dios le debemos algo, ¿pero qué es lo que le debemos? Y ¿qué es lo que le debemos pagar? ¿De qué necesita Dios?, Si todo le pertenece como dice el SALMO 50: 10-12 “… PORQUE MÍA ES TODA BESTIA DEL CAMPO, Y LOS MILLARES DE ANIMALES EN LOS COLLADOS. CONOZCO TODAS LAS AVES DE LOS MONTES, Y EN MÍ PODER ESTÁN LAS FIERAS DEL CAMPO. SI TUVIERA HAMBRE NO TE LO DIRÍA A TI, PORQUE MÍO ES EL MUNDO Y SU PLENITUD…”


Esto es axiomático, no hay contradicción de Jehová es el mundo y su plenitud. Así lo confirma el SALMO 24:1.” DEL SEÑOR ES LA TIERRA Y TODO LO QUE HAY EN ELLA, EL MUNDO Y CUANTOS LO HABITAN;” sin embargo ya leímos lo que el Señor Jesucristo dijo: “… DAD A DIOS LO QUE ES DE DIOS…” Para que nosotros podamos dar algo, necesitamos saber qué es lo que pide de nosotros y desde luego que Él no pide algo que nosotros no tengamos. Quizá podemos argumentar: si me pide dinero yo no le puedo dar porque soy pobre, el Señor pide del hombre algo más valioso que el dinero, que para Dios es de gran valor.

El Rey David declaró que el humano le da Dios lo que de Dios recibe, así se lee en el primer libro de las CRÓNICAS 29: 14 “… PORQUE TODO ES TUYO Y LO RECIBIDO DE TU MANO TE DAMOS…” Nadie entonces es la excepción, todos los habitantes de la tierra estamos en la obligación de dar al Creador lo que de Él hemos recibido. No hay excusa de ninguna naturaleza. No existe evasivas para no presentar algo ante su Creador; ya sea rico o pobre sea Judío o Gentil, pero todos hemos recibido algo de Nuestro Dios y de ese algo le debemos entregar, porque el que dice que dé El Eterno No recibe nada, le tendríamos que recordar que respira un aire que no se le cobra y si dejara de respirar un par de minutos seria su muerte.

Pero el hombre se excusa diciendo: no entiendo o no comprendo lo que está escrito o yo no lo entiendo así, para evitar ardidamente querer comprender, claramente el Señor ha establecido en su Palabra qué es lo que desea del hombre.

Señalaremos el primer caso dice así en PROVERBIOS 23:26 “… DAME HIJO MÍO TU CORAZÓN, Y MIREN TUS OJOS POR MIS CAMINOS…” He aquí la petición de Dios. “DAME TU CORAZÓN.”  ¿Pero a que corazón se refería el Señor? Sabemos anatómicamente que el corazón del hombre está ligeramente inclinado al lado izquierdo, no obstante la Palabra de Dios dice que el corazón del necio está a su mano izquierdo y el corazón del sabio al lado derecho (Eclesiastés 10:2) “EL CORAZÓN DEL SABIO BUSCA EL BIEN, PERO EL NECIO BUSCA EL MAL.” esto significa que en la Palabra de Dios cuando se habla del corazón, se puede referir tanto al corazón material, como a un corazón simbólico. ¿Cuál de los dos pedirá el Señor? El corazón material es: en si la vida del hombre y el Creador solicita la vida del hombre; así mismo en el sentido figurado el corazón representa al centro de los sentimientos y deseos esto es claro. MATEO 12:34: ¡GENERACIÓN DE VÍBORAS! ¿CÓMO PODÉIS HABLAR LO BUENO, SIENDO MALOS? PORQUE DE LA ABUNDANCIA DEL CORAZÓN HABLA LA BOCA. bueno si no está claro veamos cómo dice: LUCAS 6:45: EL HOMBRE BUENO, DEL BUEN TESORO DE SU CORAZÓN SACA LO BUENO; Y EL HOMBRE MALO, DEL MAL TESORO DE SU CORAZÓN SACA LO MALO; PORQUE DE LA ABUNDANCIA DEL CORAZÓN HABLA LA BOCA.

Esto significa que el Señor solicita tanto lo uno como lo otro, la vida misma del hombre y los deseos de esa vida, ambas cosas juntas, porque no se puede ofrecer simplemente un deseo, sin la demostración afectiva de una vida. Así mismo es imposible ofrecer una vida sin deseos ni sentimientos, preguntémonos ahora ¿… QUÉ ES MI VIDA? ¿CUANTO VALOR PUEDE TENER DELANTE DE DIOS…? Para contestar estas preguntas debemos analizar lo grandioso de un corazón material y lo maravilloso de la vida del hombre.

El corazón es una visera torácica, hueca y muscular de forma cónica, puede asegurarse que es el órgano más maravilloso del cuerpo humano, y sin duda el más fiel, pues trabaja día y noche, acompaña al hombre día y noche en todas sus actividades y por decirlo así es como un vigía que es fiel a su misión sigue su trabajo mientras el hombre duerme, su deber es no traicionarlo jamás. Es una maquina es una maquina automática que inspirada por ciertas vibraciones cerebrales y asistida por las aspiraciones, envía y recoge la sangre a todo el cuerpo, se contrae y se relaja aproximadamente 100.000 veces al día, esto se dice a grandes rasgos, pero entendemos que esa cantidad es digna de consideración, ya que al pasar un solo minuto el corazón se contrae y se relaja 70 u 80 veces, en una hora 4.800 y en una 24 horas pasa de las 100.000 veces, en un año sobre pasa a los 41. Millón de veces, ¿… Y AHORA EN TODA SU VIDA…?

Esto significa que su existencia es un continuo movimiento, “… DECIR--- VIDA ES DECIR MOVIMIENTO…” el corazón latiendo, la sangre en una perpetua carrera; ahora preguntémonos ¿quién le da al corazón ese continuo movimiento, esa carrera interminable de la sangre?  Pues, quien otro sino el CREADOR.  Él le está dando esa vida a cada momento; y, ¿para qué dedicas tú Ese corazón? ¿ Para fumar?, ¿ para embriagarse?. Meterle drogas, ¡QUE ESTAS HACIENDO CON LA OBRA MARAVILLOSA DEL DADOR DE LA VIDA, SI TU MISMO DETRUYES LO QUE TE SIRVE PARA MANTENERTE VIVO! Será posible que esa obra maravillosa como es el corazón lo ocupe en cosas insignificantes? Que aun ni los animales lo practican?.

Es lamentable en verdad, que el ser humano desperdicie esos millones de latidos en una vida indiferente, sumergido en la más negra ignorancia respecto a su Creador dedicando toda una vida a la maldad. Sabiendo esto que Dios le da vida a nuestro corazón desde el vientre de nuestra madre. Y sin duda dejará de funcionar hasta el último suspiro.

Y este cuerpo dejara de funcionar porque tú has colaborado para que desgaste cada segundo y minuto de tu vida, ¡que lastima damos!

Te invito a reflexionar, a que no te conformes con vivir una vida hasta cierto punto irracional, incorporarse y apreciarse en todo lo que vale y dale a Dios esa vida, esa energía que el mismo Creador demanda de usted, para su gloria, honra y alabanza no maltrates tu cuerpo.

De manera que al pedir el Señor el corazón, como leímos en PROVERBIOS 23:26. ESTÁ PIDIENDO LA ENERGÍA, todo ese potencial que está almacenado en nosotros con el cual podemos alabarle; no se trata entonces de entregarle la víscera, el Señor pide el efecto del corazón y ese efecto es la vida misma el hombre posee, su fuerza, su actividad, su tiempo, si vida completa, es esta la razón por la que debemos entender que el cristiano no debe conformarse con dedicarle al Creador un simple culto de dos horas y luego olvidarse de Él y divagarse en las entretenciones de este mundo perdido, que algunos ya olvidaron que deben congregarse y buscar al Señor, y si lo hace es cuando de verdad se ven en conflictos, penas graves y enfermedad incurable, ahí si existe un Dios.

Y por vivir esa vida mediocre de cristianos, los escépticos dicen no hacerse religiosos porque ven la hipocresía de los evangélicos que continuamente están en las iglesias sin que puedan entregar su corazón al Señor. Cuantos cristianos desgastan esa energía en la prostitución y en los muchos placeres, se conforman con vivir un cristianismo de fantasías, pero no una vida real, agradable a su Creador, todo porque no le ha entregado su vida, su corazón, sus fuerzas y su mente dice Mateo: 22: 37 “AMA AL SEÑOR TU DIOS CON TODO TU CORAZÓN, CON TODO TU SER Y CON TODA TU MENTE” —LE RESPONDIÓ JESÚS—.

Así mismo entendemos que el termino corazón en la Palabra de Dios es el centro de sentimientos, ya sean buenos o malos; el Divino Salvador comparó al corazón como un cofre de sentimientos, en el cual puede haber un tesoro de bondades o tesoro de maldades como ya leímos en MATEO 12:35 “… EL HOMBRE BUENO DEL BUEN TESORO DEL CORAZÓN SACA BUENAS COSAS, Y EL HOMBRE MALO, DEL MAL TESORO DEL CORAZÓN SACA MALAS COSAS…”

Dios ha dado capacidad al hombre para que pueda discernir entre lo bueno y lo malo, para que usando de su libre albedrío se incline a lo bueno o a lo malo; a esto lo conocemos como el poder de la voluntad. El Creador ha dotado a todo ser humano de ésta facultad, de manera que al decir el Señor: ”… DAME HIJO MÍO TU CORAZÓN…” se está refiriendo a la voluntad del hombre.

El Eterno como un ser Todo Poderoso podría obligar a los millones de habitantes que poblamos la tierra que le adoremos, pero no lo hace porque Él no quiere que seamos muñecos manejados por una mano Poderosa, Él quiere que el hombre de su propia voluntad busque las cosas Santas; por esto al decir las Escrituras: “DAME TU CORAZÓN”, quiere decir:  DAME TU DECISIÓN, TU DESEO, TU VOLUNTAD. Es importante que entendamos que esa facultad la Hemos recibido del Creador, no ha sido por un sistema evolutivo, olviden esas doctrinas mundanales satánicas , La voluntad; es un don de Dios, por esto mismo es que Él lo pide. Cuando decía el rey David: “DE LO RECIBIDO DE TU MANO, TE DAMOS”, tenía suficiente razón, porque la facultad de elección viene de Dios.

En el libro de PROVERBIOS 4:23 dice: “… SOBRE TODA COSA GUARDADA, GUARDA TU CORAZÓN; PORQUE DE ÉL MANA LA VIDA…” si alguna cosa debemos de guardar o cuidar es nuestra decisión, de las determinaciones de nuestra voluntad, de esto depende la vida eterna para nosotros. Si inclinamos nuestra voluntad al mal, esto acarreará el infortunio en esta vida y la sentencia de muerte en el juicio final, pero si nuestra intención la determinamos firmemente en al buen camino, de esta intención estará manando la vida, vida abundante. SALMOS 25:12:  ¿QUIÉN ES EL HOMBRE QUE TEME A JEHOVÁ? EL LE ENSEÑARÁ EL CAMINO QUE HA DE ESCOGER.

Con un pequeño descuido, el corazón, esto es la voluntad del hombre se puede constituir en un nido de perversidades, como lo dijo nuestro Señor en MATEO 15: 19-20 “… PORQUE DEL CORAZÓN SALEN LOS MALOS PENSAMIENTOS, MUERTES, ADULTERIOS, FORNICACIONES, HURTOS, FALSOS TESTIMONIOS, BLASFEMIAS ESTAS COSAS SON LAS QUE CONTAMINAN AL HOMBRE…” al decir así el Maestro no se refería a la víscera torácica, se refería a la voluntad del hombre, es de allí donde salen los malos sentimientos que contaminan al hombre. Aprovechemos esa bellísima facultad de autodeterminación y entreguémosla al Señor y tendremos grande galardón.

Y es a saber que se puede buscar la perfección si, Dios hizo al hombre perfecto pero es el humano eligió, por su voluntad, por decisión propia volverse perverso ECLESIASTÉS 7:29:        HE AQUÍ, SOLAMENTE ESTO HE HALLADO: QUE DIOS HIZO AL HOMBRE RECTO, PERO ELLOS BUSCARON MUCHAS PERVERSIONES.

Otra cosa que pide el Señor, aparte del corazón es la mente, así lo dijo Él en MATEO 22:37 “… Y JESÚS DIJO: AMARÁS AL SEÑOR, TU DIOS, DE TODO CORAZÓN Y DE TODA TU ALMA Y DE TODA TU MENTE…” El amor que el Señor pide debe emanar no solamente del corazón, es decir del sentimiento irracional, debe proceder también de la mente, de la inteligencia, esto significa que el Señor se merece un amor con inteligencia, con toda la razón, que proceda de lo más profundo del sentimiento humano, para que ese amor pueda ser bien fundado y amplio en todos sus aspectos.

¿ALGUNA VEZ HA PENSADO TU, EN LO QUE ES LA MENTE HUMANA?, es muy importante que analicemos algo de ella, pues muchas veces leemos y nosotros mismos no sabemos lo que estamos leyendo. Es fácil decir: mi mente, incluso el significado que le da el diccionario es muy sencillo, dice así: MENTE, INTELIGENCIA, PENSAMIENTO, MEMORIA. Pero sí solo si solo tratamos de comprenderlo con esa definición, no llegaríamos a entender en todo lo que vale nuestra mente, la memoria, son facultades que residen en encéfalo, por lo tanto es necesario que analicemos algo de él.

El encéfalo o la cabeza está dividida en tres partes importantes, EL CEREBRO, EL CEREBELO Y EL BULBO RAQUÍDEO, estos están protegidos por una caja llamado cráneo. El encéfalo o la cabeza están protegidos por tres membranas, una de ellas, llamada “Duramadre” la cual es muy fuerte y resistente y tapiza interiormente el cráneo al cual se adhiere. Otra membrana se llama “Piamadre” y recubre la masa encefálica estrechamente, siguiendo todas las anfractuosidades de su superficie. La tercera se llama “Aracnoides”, semejante a una tela de araña y está clocada entre las dos anteriores. Entre la aracnoides y la piamadre hay un espacio que contiene el “ Líquido Cefalorraquídeo”, que actúa    de amortiguador de golpes, estamos hechos tan perfectamente, pero algunos dicen: No hay Dios.

Notemos el cuidado que ha tenido nuestro Creador en proteger la parte más importante del organismo; sabiendo de antemano que una persona puede sufrir un golpe fuerte y de esta manera lo protege y ha colocado un líquido entre las membranas protectoras y ese líquido sirve como un amortiguador.

Todo esto lo prepara el Creador desde el vientre de la madre durante 9 meses, así DICE ECLESIASTÉS: 11:5 “COMO TU NO SABES CUAL ES CAMINO DEL VIENTO, O COMO CRECEN LOS HUESOS EN VIENTRE DE LA MUJER EN CINTA, ASÍ IGNORAS LA OBRA DE DIOS EL CUAL HACE TODAS LAS COSAS.”

Detengámonos a pensar por un momento en esta obra maravillosa como se van formando los huesos del cráneo y cada una de sus membranas, las cuales protegen al hombre toda su vida y aun ese líquido “ cefalorraquídeo” ayudará al niño para que no se estropee su mente.

El Señor sabe que el hombre necesita tener su mente en perfectas condiciones, por lo tanto Él mismo ha preparado los medios para conservación y protección. Notemos que no es injusto entonces de pedir un amor con toda la mente, porque Él mismo ha puesto los medios para que tú, Y todos los seres humanos seamos seres racionales.

Decíamos que el encéfalo está divido en tres grandes partes y que la primea parte es el cerebro. Esta parte es el órgano director de todos los actos voluntarios. Es el centro de las funciones intelectuales, como la inteligencia y la memoria. Los fisiólogos han localizado los centros que rigen la vista, el tacto, el oído y el control de ciertos movimientos musculares. Ya podemos calcular el valor de nuestro cerebro, es lo más preciado de toda la creación, no existe ninguna otra cosa creada que iguale al cerebro, las joyas preciosas, el oro, los planetas, las galaxias, todo el universo, no es de compararse con la maravilla del intelecto. ¿puedes comprender entonces que Esto fue lo que precisamente  nos hizo ser la imagen  misma de nuestro Creador?, tener decisión propia, cuerdos, racionales y de la inteligencia dela cual estamos dotados, y al decir que somos imagen del Eterno dice JUAN 10:34:       JESÚS LES RESPONDIÓ: ¿NO ESTÁ ESCRITO EN VUESTRA LEY: YO DIJE, DIOSES SOIS? y el salmista refiere esto más claramente SALMOS 82:6:  YO DIJE: VOSOTROS SOIS DIOSES, Y TODOS VOSOTROS HIJOS DEL ALTÍSIMO;

Cuando en el GÉNESIS 1:26 dice: “…HAGAMOS AL HOMBRE A NUESTRA SEMEJANZA…” no se refiere al físico del hombre, se está referendo a la parte intelectual con que creado el ser humano. Pues a ninguna otra creatura se le dijo lo mismo al momento de ser creado, esto exclusivamente al hombre. De manera que cuando el Señor dice: “… AMARARÁS AL SEÑOR CON TODA TU MENTE…” es porque Él nos ha dado todos los medios para que el hombre pueda amar a su Dios con toda inteligencia.

A Dios se debe dirigir el hombre con todo entendimiento, no con torpeza, sabemos que un demente no puede adorar a Dios, porque sencillamente su mente está descontrolada, desde luego existen muchas razones de ese descontrol, pero en ninguna de ellas interviene la voluntad de Dios. Más bien la demencia es cosa opuesta totalmente al Creador. Él ama la inteligencia y por ello lo ha colocado en el hombre, millones de células trabajan en el cerebro para constituir así al hombre, algo más que un simple muñeco de barro. Démosle a Dios lo que Él nos ha dado, amémosle con inteligencia ofrezcámosle a Dios para Gloria y Honra, ya que Él nos dotado de la facultad de tener una mente inteligente.

Por otra parte el cerebro es el que dirige los movimientos de los músculos, comunica la energía nerviosa necesaria para su contracción, al correr, saltar, jugar etc. están controlados por el cerebelo .y bulbo raquídeo, rige las funciones respiratorias, circulatorias y de la fonación, sin las cuales no se podría respirar, ni hablar, ni funcionaría nuestro corazón.       
      
 Por ésta breve exposición podemos entender el trabajo fantástico que desempeña nuestra cabeza, bien lo compara el sabio Salomón en el libro de ECLESIASTÉS 12: 6 “… COMO EL CUENCA DE ORO…” en verdad nuestra cabeza ablando de sus facultades es verdaderamente como un “un cuenco de oro”, de un valor incalculable. Allí está la fuente de la inteligencia, de la memoria, el centro de la vista, del olfato, del oído, de la voz, del control de nuestros músculos podemos compararlo como “ el alto mundo de nuestro cuerpo” a quien todos le obedecen ciegamente.

Es necesario que no pasemos desapercibidos lo que es el sentido de la vista, ciertamente estamos acostumbrados a ver, nos es natural que al levantarnos volvamos ver todas las cosas, ya no le damos tanta importancia, pero entendemos que el hecho de ver, es algo sencillamente maravilloso, es uno de los trabajos perfectos de nuestro cerebro, el ojo en sí es una cámara fotográfica, pero el trabajo se desarrolla dentro del cerebro. Así mismo el sentido del oído capta el sonido más pequeño hasta el más estruendoso y así sucesivamente podríamos mencionar cada uno de los trabajos más perfectos que desempeña nuestro cerebro, trabajos que los pasamos diariamente desapercibidos  sin apreciarlos, ni los cuidamos, ni los usamos en algo útil. En PROVERBIOS 20:12 claramente dice:”… EL OÍDO QUE OYE, Y EL OJO QUE VE, AMBAS COSAS IGUALMENTE HA HECHO JEHOVÁ…”


No es entonces mucho que dediquemos al Señor Dios,  tiempo al estudio de su Palabra, porque estamos usando el sentido de la vista que Él nos dio, no es mucho el que dediquemos un  tiempo para escuchar su Palabra, porque Él nos dio el don de oír.

 No son entonces grandes tributos de nuestra parte, porque esto no exige absolutamente ningún esfuerzo, porque todo lo hemos poseído gratuitamente de parte de nuestro Dios; porque no olvidemos el pasaje que ya leímos “… DE LO RECIBIDO DE TU MANO TE DAMOS…” Nada es nuevo, nada sale exclusivamente de nosotros, más bien estamos devolviendo al Creador lo que Él en su bondad nos ha dado.

De allí por qué encontramos Mandamientos tan terminantes en la Sagrada Escritura respecto a nuestro servicio espiritual, en   DICE: “… OCÚPATE EL LEER…” y en ECLESIASTÉS 5:1 dice: “… ACÉRCATE MÁS PARA OÍR MEJOR,” amabas cosas son importantísimas en el culto al Altísimo, el leer y el oír la Palabra de Dios, sí tu máximo lo haces con suma reverencia, no se alabe, no piense que estás realizando una gran obra para Dios, más bien solo hace lo que se debe hacer. Así dijo Jesucristo en LUCAS 17: 10 “… ASÍ TAMBIÉN VOSOTROS, CUANDO HUBIERES HECHO TODO LO QUE OS HE MANDADO, DECID: SIERVOS INÚTILES SOMOS, PORQUE LO QUE DEBÍAMOS HACER, HICIMOS…” Sí el ofrecerle al Creador la vista, el oído, la inteligencia, la memoria son cosas que sencillamente debías hacer y sí lo estamos haciendo, perfecto, ese es nuestro deber, no nos consideremos santos perfectos o mártires, más bien pensemos de nosotros mismos que somos siervos inútiles, insignificantes, que medianamente le estamos dando a nuestro Señor lo que de Él hemos recibido y sí acaso hasta aquí, no le hemos dedicado nuestra vista a la lectura de su Palabra ni el oído a su palabra.

Es menester que reflexionemos, pues quizás gastamos nuestro tiempo en ver cosas sin importancia y sin ningún provecho. Pues, necesario es que tengamos el cuidado con nuestros sentidos de los ojos y los oídos ECLESIASTÉS 1:8 dice: “… LOS OJOS NOS SE CANSAN DE VER NI LOS OÍDOS DE OÍR…”

No demos rienda suelta a nuestros ojos, gobernémoslos con la inteligencia, ocupémoslos para edificarnos.

Y así cada una de las funciones del encéfalo debemos ocuparlos para Gloria de Dios. Sí el cerebelo controla los movimientos de los músculos, aprovechemos ese control haciendo que nuestro ser se arrodille ante nuestro Hacedor, pues, escrito está: “… A MI SE DOBLARÁ TODA RODILLA…” (ROM. 14:11). Es el cerebelo el que controla nuestros pasos, si un microbio nos causa encefalitis no podríamos dar ni un solo paso y pronto quedaríamos ciegos, pero si gracias a Dios hasta aquí hemos sido conservados con nuestras facultades en perfecto estado, es por la Misericordia de Dios para con nosotros, entonces seamos agradecidos y glorifiquemos el Nombre del Todo Poderoso y asistamos a las reuniones de su pueblo.

Y si así mismo, el bulbo raquídeo controla las funciones del habla, aprovechemos para hablar del bien, no del mal, no de blasfemias, no palabras soeces que hacen a la persona vil y vulgar. Ocupemos ese don maravilloso del habla para darle Gloria al Señor. Devolvamos la modulación de nuestra voz en forma de cantos y canciones espirituales, de oraciones y de predicar su Palabra para engrandecer al que nos ha dotado de ese mundo maravilloso de órganos.
Todo nuestro ser es de incalculable valor, no existe una cifra con la cual señalaremos el valor de nuestro organismo. Los científicos al analizar las partes de las cuales está compuesto el hombre como el hierro, fosforo, calcio etc. valúan al hombre en menos de un Dólar. Es decir que todos los ingredientes juntos forman una masa tan pequeña que no se necesita más de cien centavos para comprar esa materia. Ciertamente esto comprueba que el hombre es del polvo de la tierra como está escrito: (GENESIS. 2:7) “… FORMÓ PUES, JEHOVÁ DIOS AL HOMBRE DEL POLVO DE LA TIERRA…” pero esto mismo nos hace admirar la obra perfecta de Nuestro Dios, ya que con esa cantidad irrisoria de polvo ha hecho en ser dotado de sentidos y facultades que son asombrosos.         
 Recordemos entonces que en cierta forma no somos nada y que en otro sentido poseemos lo más grande del universo.

Si todo esto lo hemos recibido de Dios, ofrezcámosle nuestro ser al mismo Creador. Es tiempo salir de esa rutina del aparente cristianismo de cultos en los templos, en la cual no estamos haciendo nada, sino más bien engañándonos a nosotros mismos, no nos conformemos con pasar una vida religiosa sin tomar en cuenta lo que Jehová Dios ha hecho en nosotros.

Si ya lo hemos dicho en otras ocasiones y lo decimos otra vez, que el asistir a la casas oración es indispensable, pero no solo en eso se concreta el culto a Señor, recordemos lo que dijo el apóstol Pablo en 1 CORINTIOS 3:16 “… ¿NO SABÉIS QUE SOIS TEMPLO DE DIOS Y QUE EL ESPÍRITU DE DIOS MORA EN VOSOTROS…?”. Somos el templo andante de Dios, el templo viviente, por lo tanto toda la ofrenda está en nosotros mismos, no podemos señalar en este tiempo un lugar que sea más santo que el otro.

Sabemos que en el antiguo pacto era Jerusalén y especialmente el lugar donde se encontraba el templo; pero en la actualidad cada redimido es un  templo santo, el cual no hay que profanar, debemos cuidar nuestro cuerpo como cosa santa, porque es allí donde mora el Señor, por lo tanto no busquemos exteriormente en donde encontrarlo, mucho menos en  una imagen o ídolo, esto es arcaico, pagano, es pecado, no ya no busque más a Dios a través de la imaginación de un hombre, usted y yo somos el templo de Dios, en nosotros mismos puede morar, pero no podemos profanar ese templo con vicios, con drogas, licores y tabaco y otros vicios y vivir con odios, intrigas y venganzas, vanidades todo eso y mucho más profanan el templo de Dios, ensuciando así las ofrendas con las cuales pueden alabar al Creador.

Es necesario que digamos juntos con el rey David: …” EXAMÍNAME Y RECONOCE MIS PENSAMIENTOS; Y VE SI HAY EN MÍ CAMINO DE PERVERSIDAD Y GUÍAME EN EL CAMINO ETERNO…” (SALMOS 139:23-24).

Seamos sinceros con nosotros mismos y digámosle a nuestro Creador que Él reconozca nuestros pensamientos, que vea el Señor en qué estamos ocupando el mundo maravilloso de nuestro cerebro y en qué estamos ocupando nuestro cerebro e inteligencia.      
                                      
En este presente tiempo vemos que la inteligencia se ocupa más en el pecado, como los asesinatos, el robo, la corrupción, el adulterio, la falsedad religiosa y otros males que aquejan a la humanidad. Y esto muchas veces en los ya conocen la Palabra de Dios.

 Como es esto que nosotros mismos con todo y la Palabra de Dios no hemos entendido que la mejor ofrenda, el mejor culto, la mejor honra la traemos nosotros mismos. Y que, si habláramos de lo que está fuera de nosotros, de cuantas cosas nos ha provisto el Señor, como está escrito en libro de los SALMOS 104: 10-15 ”… TU ERES EL QUE ENVÍAS LAS FUENTES POR LOS ARROYOS; VAN ENTRE LOS MONTES.  ABREVAN A TODAS LA BESTIAS DEL CAMPO; QUEBRANTAN SU SED LOS ASNOS MONTESES. JUNTO A AQUELLOS HABITAN LAS AVES DE LOS CIELOS; ENTRE LAS RAMAS DAN VOCES. EL QUE RIEGA LOS MONTES DESDE SUS APOSENTOS, DEL FRUTO DE SUS OBRAS SE SACIA LA TIERRA. EL QUE HACE PRODUCIR EL HENO PARA LAS BESTIAS, Y LA YERBA PARA EL SERVICIO DEL HOMBRE, SACANDO EL PAN DE LA TIERRA Y EL VINO QUE ALEGRA EL CORAZÓN DEL HOMBRE, Y EL ACEITE QUE HACE LUCIR EL ROSTRO Y EL PAN QUE SUSTENTA EL CORAZÓN DEL HOMBRE.                                                
Por estos pasajes entendemos que el agua, el fruto de la tierra, la hierba, las bestias, todo esto existe para el bien del hombre, de tal manera que de allí extraemos el pan de cada día, de las fuentes de las aguas nos sus tetamos todos los días, la carne, la mantequilla, la leche, las verduras, las flores, que adornan y perfuman la casa. Todo esto es provisión del Eterno Dios. De esto qué podemos ofrecerle como cosa nuestra? Si todo es de Él. Bien decía el Salmista “ lo recibido de tu mano te damos” y ahora que podemos llevar al altar fuera de nosotros .

Aún en el trabajo del cual usted se ocupa, dice ECLESIASTÉS 3:10 “  HE VISTO LA TAREA QUE DIOS HA IMPUESTO EL GÉNERO HUMANO PARA ABRUMARLO CON ELLA.” Dios lo ha dado los hijos de los hombres que debía ganarse la vida con el sudor de su frente, esto significa que el producto de ese trabajo también es dado por Dios, nosotros ofrecemos algo de EL  no es de extrañarse porque de Dios lo hemos recibido como no obstante sabemos que el creador pide solamente la décima parte de la ganancia del hombre y la pide, NO para el propiamente, sino para el bien de la misma humanidad para que haya alimento espiritual, por ejemplo hacer estos estudios o pasar la palabra de Dios a través de un programa radial se pasa gracias a los diezmos de los hermanos de Iglesia de Dios, los estudios por correspondencia se envían a usted gratuitamente gracias al diezmo, y quiere decir que ese dinero se convierte ganancia espiritual, en beneficio para el mismo humano, así debería ser. Solamente para proporcionar alimento espiritual de la Iglesia de Dios, nada más.

Luego entonces de lo recibido de Dios, eso le damos, pues el señor no se queda con ello, puesto que es el Todopoderoso no necesita de nosotros los humanos, pero Él nos pide para administrarnos a nosotros mismos. Sabemos por la escritura que el diezmo no es mosaico, no se inició con la ley de Moisés, es patriarcal muchísimos años antes de Moisés; el diezmo estaba establecido por Dios de tal manera que Abraham; el padre de la fe diezmo por fe, GÉNESIS 14:19-20 y Jacob, también diezmo, GÉNESIS 28:19-22. Los grandes hijos de Dios siempre ha reconocido que nada fue de ellos, todo pertenecía a Dios; Abraham por ejemplo fue riquísimo y no escatimó en dar el diezmo, siempre lo dio y buena voluntad. Si ahora usted trabaja y gana de su diezmo para gloria de Dios, recuerde que de Dios se recibe, salud, fuerza, inteligencia para trabajar lo tanto el fruto de su trabajo se debe a la bondad y voluntad de Dios, no le niegue al señor de lo que está recibiendo y si antes gastaba en sus vicios y en una posible vida degenerada, porque no darle ahora Dios lo que tanto necesita para su obra.

Y al momento de darlo, no lo de con cierto aire de seguridad, delo, - de todo corazón, que El que está en los cielos ve su buen propósito y El de tomar en cuenta lo que usted está devolviendo de sus innumerables favores y misericordias.

Que el Señor bendiga su palabra en vuestros corazones, te vea con agrado y te conceda su paz.

IGLESIA DE DIOS
COLUMNA Y APOYO DE LA VERDAD       
        
Formando Líderes con Valores, Gamaliel Estrada,
משרתו של המשיח